¿Quieres Chocolate? [Nicolas Thompson]

El monótono día de Mello ya comenzaba a ser aburrido. La academia en si era demasiado rutinaria, y solo para sumar puntos no había visto a aquel pelirrojo hermoso al que ama y desea tanto, ni al "Inocente" y "Tierno" Near. Aquello más de una vez en el día le sacó, sin que el rubio lo deseara, un pesado suspiro. ¡No! El no queria suspirar, ni que fuera una nena esperando la brillante llegada de su principe azul. En definitiva, odiaba estar así.

Inesperadamente, mientras caminaba por los pasillos, una infantil voz capturó su atención. "Chocolate, chocolate" podía escuchar en un dulce tono, tan dulce que solo le provocó repulsión; pero aquella palabra no la podía dejar pasar ¡Ah! Chocolate, ¡Que palabra tan hermosa! Una verdadera trampa para el rubio, quien suavemente esbozó una sonrisa y pronto buscó con  la mirada al dueño de aquella voz que cual amrtillo resonaba en su mente. La presencia se tornó oscura, llamativa, hermosa... Y a la vez ¿por qué era escalofriante para Mello?

Todo tuvo sentido al ver a Nicolas: un shinigami que utilizaba una "máscara" pues es un ser despiadado a pesar de su apariencia. Mello batalló años atrás con él y fue el menor el vencedor. Frunció el ceño y maldijo al recordar, pero también recordó el extraño lazo de "amistad" que los unía. Lo sorprendió por la espalda y, forzando una sonrisa atrapó al muchacho entre sus brazos, acariciando con la mano izquierda su abdomen y con la derecha acercó una barra de chocolate a los pálidos labios. "¿Quieres chocolate, N.?" murmuró con cierta malicia. Tenía intenciones de jugar con su mente. Acercó el rostro a su cuello, realmente adoraba el olor a chocolate que emanaba, por lo que sin resistirse dio una lenta lamida en el lugar. ¿Qué mejor aliado y arma que alguien como él? Sabía lo suficiente como para manipularlo.